HISTORIA DE UNA UNIÓN

“Cuenta el número de las estrellas, si puedes”, le dijo Dios a Abraham, “así será tu descendencia”. Imagino la mezcla de sentimientos en el corazón de Abraham al escuchar estas palabras: confianza e incertidumbre, ilusión y temor, audacia y prudencia... Y al fin la promesa se cumple de manera desbordante.
            El pasado curso 2012/2013 recibimos, en los colegios Purísima Concepción (Las Nieves) y Medalla Milagrosa de Ávila, dirigidos por las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, la noticia de la fusión de los dos centros. Con esta noticia se inició un proyecto nuevo, una aventura apasionante que exigía de toda la Comunidad Educativa poner lo mejor de cada uno para comenzar a caminar juntos. Y nos pusimos “a contar estrellas” como Abraham... Descubrimos muchas:
~        La estrella de la historia de nuestros dos colegios centenarios, dos itinerarios que confluyen en un camino común para dirigirnos al futuro, potenciando la educación integral de nuestros alumnos, transmitiendo el carisma vicenciano con más fuerza.
~        La estrella de una amplia oferta educativa para las familias, que abarca desde Educación Infantil hasta Bachillerato y un P.C.P.I., favoreciendo la coordinación pedagógica entre todas las etapas.
~        La estrella de la innovación educativa con la implantación de nuevas metodologías ya iniciada en los dos centros
~        La estrella de la apuesta por el aprendizaje de los idiomas que tras la fusión de los centros brilla más, al fortalecerse la secciones bilingües de Primaria y Secundaria y compartir los proyectos que ya se realizaban en cada colegio.
~        La estrella de la novedad que provoca ilusión, que desinstala y nos pone en búsqueda, que demanda creatividad e imaginación.
Al finalizar el curso ya habíamos recibido un nombre nuevo: Colegio Milagrosa – Las Nieves y todos los trámites administrativos estaban hechos, la promesa, el sueño se estaban haciendo realidad. El día 11 de junio salía publicada en el B.O.C.yL. la autorización del nuevo centro, oficialmente, el día 1 de septiembre de 2013 comenzaba una nueva etapa de la historia de los colegios vicencianos en Ávila.
El día 28 de junio quisimos celebrar este acontecimiento, lo hicimos con una eucaristía en la Iglesia del Convento de San José, lugar emblemático pues allí inició su reforma Santa Teresa de Jesús. Lugar de comienzos, por tanto, de conversión a lo esencial, de sencillez y alegría. Iniciamos la celebración de manera muy simbólica. Una antorcha partió del colegio Purísima Concepción y otra de Medalla Milagrosa, ambas llevadas por alumnos de cada centro acompañados por las directoras. Estas simbolizaban la luz transmitida en ambos colegios durante generaciones. Las dos antorchas llegaron juntas al pie del Altar y con ellas se encendió un pebetero en el que ya ardía una única llama. Esta llama, alimentada con la eucaristía, sigue hoy brillando, sigue calentando nuestros corazones e iluminando nuestros pasos.
Hoy, tras un comienzo de curso muy intenso, seguimos ilusionados con este proyecto, buscando cada día el diálogo que nos permita discernir y hacer opciones, que nos ayude a renunciar a lo propio de cada uno para elegir lo que brota de la reflexión conjunta, disfrutando de la riqueza de abrirnos a la visión del otro para construir nuevas sendas. Como Abraham vemos cumplida la promesa: en los rostros alegres de nuestros alumnos, pequeños y grandes, en el esfuerzo diario de cada docente que prepara con entusiasmo clases y actividades para sus chicos, en los detalles del personal no docente atento a cualquier necesidad que pueda surgir, en la satisfacción de las familias que apoyan este proyecto común, en la participación en la vida del centro de las dos Comunidades de Hermanas. Gracias a todos…sigamos contando estrellas.
Sor Esther López Aguado  

No hay comentarios:

Publicar un comentario